En el gimnasio del Complejo Penitenciario porteño se efectuó la ceremonia de Inauguración del Año Académico Universitario de la UPLA.
Lo que hace unos años sonaba disparatado hoy se está convirtiendo en realidad para un grupo de personas privadas de libertad del Complejo Penitenciario de Valparaíso. 37 reclusos están estudiando la carrera de técnico en administración logística al interior de la unidad, la cual es impartida por la Universidad de Playa Ancha (UPLA), a través de su instituto profesional, desde el año 2017.
Con la finalidad de incentivarlos a seguir estudiando en pos de un mejor futuro y demostrarles el compromiso con este proceso educativo es que Gendarmería y la casa de estudios realizaron la inauguración del año académico. La ceremonia se efectuó la tarde de este lunes en el gimnasio del establecimiento penitenciario y contó con la presencia de autoridades de ambas instituciones, además de la seremi de justicia, Amaia Arraztoa, director regional de Gendarmería, coronel Eduardo Muñoz Bravo, y familiares de los alumnos.
En la oportunidad el subdirector técnico de Gendarmería, Alejandro Arévalo, sostuvo que: “El esfuerzo que está haciendo la Universidad de Playa Ancha, instalando la carrera de técnico en administración logística en el Complejo, nos demuestra que éstos si pueden dar resultados. Estamos en la segunda generación de estudiantes y creemos que tenemos que seguir trabajando y esforzándonos para la reinserción social de los privados de libertad”.
Las palabras de Arévalo fueron respaldadas por el rector de la UPLA, Patricio Sanhueza Vivanco.
“Estamos contentos de estar aquí junto a una segunda promoción de estudiantes en esta carrera donde del primer grupo, que ingresó el año pasado, 17 personas siguieron sus estudios regularmente. Esto ha sido muy exitoso, el hecho que le hayamos dado esta esperanza ha provocado también que ellos hayan cambiado y sean mucho más seguros de sí mismos y de su propio futuro. Si la universidad puede ayudar a ese cambio, a ese progreso, a ese desarrollo de estas personas, obviamente que en eso está cumpliendo su misión, su visión e impronta”.
De igual forma la seremi de justicia se mostró: “satisfecha y con harto entusiasmo de que estos jóvenes y adultos puedan dar inicio a esta carrera y con ello abrir una puerta, una ventana, a una nueva vida, y lo que tanto queremos, que está comprometido nuestro Presidente Sebastián Piñera, a conseguir la ansiada reinserción social”.
Las posibilidades de una nueva oportunidad han generado nuevas metas en Rigoberto Mandiola, quien ya cursa el segundo año de la carrera técnica.
“Pasé primer año y ahora segundo año se viene un poquito más complicado, pero se puede. Si se puede, y aprobamos todo esto, se van a presentar otros proyectos. Me gustaría seguir avanzando con esto. Esto no es fácil, es algo que cuesta, pero igual se puede”.
Por su parte Ignacio Marciel va en primer año, y pese a que recién lleva poco más de un mes, ya está convencido de que: “Aquí uno no viene a perder el tiempo, solo hay que estudiar y ponerle empeño, nada más. He arruinado mucho mi vida como para seguir arruinándola y esta es una oportunidad que no voy a desperdiciar”.
Ignacio y los restantes estudiantes se deben trasladar de lunes a viernes hasta las salas de clases ubicadas en el multitaller. Allí permanecen de 16:00 a 19:00 horas adquiriendo los conocimientos que les permiten ver la vida con la esperanza de que se convertirán en profesionales y podrán insertarse en la sociedad.