Procedimiento se repite en los restantes establecimientos penitenciarios de la región.
Eran cerca de las 18:00 horas del pasado jueves cuando los efectivos de Gendarmería comenzaron a ingresar a los colectivos del Centro de Cumplimiento Penitenciario (CCP) de San Felipe Así se dio inicio al procedimiento de registro y allanamiento que permitió decomisar teléfonos celulares, armas artesanales y otros artículos.
En esta ocasión fue el mismo personal de la unidad -en compañía de la Unidad de Servicios Especiales, (USEP) de Quillota, Escuadrón Canino del Complejo Penitenciario de Valparaíso y personal de la dirección regional de Valparaíso- el encargado de desalojar las habitaciones y trasladar a la población penal hasta la zona de seguridad del establecimiento penitenciario.
El jefe de la unidad sanfelipeña, mayor Brallan Silva detalló que: “El procedimiento comenzó a las seis de la tarde, aproximadamente, y terminó pasadas las 21.00 horas, incautando 45 teléfonos celulares, droga, armas blancas y chicha artesanal. Hay que hacer presente que se registró a la totalidad de la población penal, 291 internos, y la totalidad de las dependencias que éstos utilizan”.
En cuanto al desarrollo de estos procedimientos en la región de Valparaíso, el jefe operativo regional (s), mayor Néstor Flores, sostuvo que: “Han sido todo un éxito por cuanto han permitido incautar un número importante de elementos prohibidos por la administración penitenciaria, lo cual vienen a maximizar la seguridad de los establecimientos penales y tanto para el personal como para los mismos internos”.
El mayor Flores agregó que estas instancias se continuarán repitiendo en todos los recintos penitenciarios de la región pues, además, vienen a dar respuesta a las políticas institucionales que tienen como fin evitar hechos negativos para la administración penitenciaria.