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Horas más tarde, y durante el desarrollo de la visita a la población penal, se volverían a decomisar elementos prohibidos.
Desde la techumbre del sector de la multicancha personal de Gendarmería del Centro de Cumplimiento Penitenciario (CCP) de San Felipe logró requisar un envoltorio en cuyo interior se escondía un cargador de pistola y municiones, entre otros artículos.
El hecho -que viene a sumarse al acaecido la pasada semana, cuando se incautaron municiones en la misma unidad- ocurrió la madrugada de este martes, exactamente a las 03:30 horas.
Personal de turno del CCP se percató de la presencia de elementos extraños ubicados sobre una malla, permitiendo así que éstos sean raudamente decomisados. Al ser revisados se encontraron: medicamentos, un cargador de pistola, una munición, cannabis sativa, celulares, una tijera, un gas pimienta, dos licencias de conducir, etc.
El jefe de la unidad sanfelipeña, mayor Carlos Ortiz, detalló que: “El funcionario que se encontraba cumpliendo funciones de servicio nocturno da cuenta, vía radial, que se encuentran dos bultos en la malla de la unidad penal, los cuales habrían sido lanzados desde el exterior, en el modo ‘pelotazo’, sacándose éstos desde el lugar desde donde se encontraban”.
Una vez requisados, el funcionario se trasladó hasta la guardia interna del establecimiento, donde se procedió a revisarlos, hallando, según lo precisó el mayor Ortiz, “en el bulto número uno una bolsa con 70 pastillas de diferente coloración, un cargador de pistola con una munición nueve milímetros sin percutar, una bolsa con sustancia vegetal color verde, una nota, una tijera de metal color café, un teléfono celular y una licencia de conducir clase B. El segundo bulto contenía 48 pastillas de diferente coloración, un cartucho nueve milímetros sin percutar, dos bolsas de sustancia vegetal color verde, una nota similar a la anterior, dos teléfonos celulares, un cartucho de escopeta calibre doce, un gas pimienta de bolsillo y una cédula de identidad chilena”.
Informado del hecho, el director regional de Gendarmería, coronel José Luis Meza, ordenó la implementación inmediata de una serie de medidas de seguridad, entre ellas el traslado de unidad del privado de libertad sindicado en ambas notas y la realización de un registro y allanamiento de toda la población penal del CCP.
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Doce horas más tarde se logró una nueva incautación de droga en la unidad penal de San Felipe. Esta vez el hecho ocurrió mientras se desarrollaba la visita de los privados de libertad, Esta instancia intentó ser aprovechada por una mujer para entregar estupefacientes a un interno. Sin embargo, sus intenciones serían frustradas por los gendarmes de la unidad, quienes le incautarían la droga y la retendrían para luego ser entregada a personal de Carabineros.
“Alrededor de las 15:45 horas, mientras se desarrollaba la visita de internos imputados de la unidad, la funcionaria que se encontraba en el CCTV (Circuito Cerrado de Televisión) se logra percatar que la ciudadana, de iniciales M.C.A.M., quien se encontraba en visita del imputado de iniciales B.M.C.L, se encontraba con actitudes sospechosas y con un cierto estado de nerviosismo. Se le hizo un acercamiento, a través de las cámaras, lográndose percatar que se encontraba con un objeto entre sus manos”.
Detectado el posible delito, se ordenó la intervención del personal uniformado, el que rápidamente procedió a derivar a los involucrados hasta la guardia interna, donde se revisaron sus pertenencias. Durante este procedimiento se logró incautar una bolsa de nylon con sustancia vegetal color verde, 30 dosis de pasta base de cocaína, 14 trozos de pastillas de clonazepam y una bolsa con clorhidrato de cocaína.
De ambos hechos se informó al fiscal de turno, quien ordenó las acciones a seguir. La mujer detenida pasó a control de detención, quedando en prisión preventiva en el CCP de Los Andes.
