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El 25 de marzo fue un día complejo para el país. Debido a las notorias alzas en los casos de coronavirus, el Ministerio de Salud tomó la determinación de poner a toda la Región Metropolitana en cuarentena. Con esta medida impuesta, se buscó que siete de cada diez chilenos no pudieran salir de casa sin permiso que justificara el desplazamiento.
Con esta determinación, gran parte del comercio tuvo que bajar las cortinas, entre ellos los centros comerciales y malls. “Era lo que había que hacer. Con los casos registrados hace 4 semanas, la gente debía permanecer aislada en sus casas y no salir sin motivo aparente a recintos de alta concentración de personas, especialmente los malls, los cuáles pueden ser grandes focos de COVID-19 sin las medidas necesarias”, señala Eduardo Olmedo Prado, director ejecutivo de la compañía de soluciones sanitarias Via Solution.
Este lunes las autoridades informaron que diez comunas de la Región Metropolitana avanzaron a Fase 2 tras la disminución de contagios, específicamente Alhué, Melipilla, Independencia, Las Condes, Talagante, Vitacura, Lo Barnechea, Providencia, La Reina y Nuñoa. Otras 16 comunas fuera de la capital entraron a la misma fase. Sin embargo, según la opinión de expertos, para volver abrir el comercio y los grandes centros comerciales de forma segura es necesario que los recintos tomen medidas más eficientes de prevención.
Inversión en nuevos anti-covid
Cuando comenzó la pandemia, muchos malls se vieron en la necesidad de adaptarse a las medidas que exigía el Gobierno para prevenir el avance del coronavirus. Una de ellas era mantener los espacios públicos siempre limpios y ventilados. Para ello, varias empresas invirtieron en limpiadores como cloro, amonio cuaternario, alcohol, entre otros.
“Ahora es cuando los malls tienen una oportunidad para tomar medidas preventivas más fuertes. Deben entender que la limpieza no es lo mismo que la desinfección. El cloro, por ejemplo, tiene un tiempo aproximado de protección de 12 horas y resulta un gran desinfectante, pero no puede ser aplicado en superficies de contacto frecuente como pasamanos o las llaves del lavamanos, ya que irrita la piel. Es por esto que en la reapertura los malls deben buscar soluciones más eficientes”, explica Eduardo Olmedo.
Control del aforo más efectivo
Otras de las medidas que se les ha pedido expresamente a los centros comerciales es el control de la cantidad de personas al interior de los recintos. A pesar de que es un asunto que ha mejorado en el tiempo, durante la pandemia han existido episodios que han dejado al descubierto graves falencias. Una de ellas es la que protagonizó Mall Plaza Vespucio en enero, cuando permitió que se generara una gran fila de personas que querían comprar una nueva zapatilla. “Se ha visto como centros comerciales se encuentran llenos de gente en plena pandemia, personas que no necesariamente van a comprar bienes esenciales. Los malls deben ser más estrictos ”, comenta Eduardo Olmedo.
Capacitación de los trabajadores
Por otro lado, para emplear las medidas que han solicitado las autoridades en los centros comerciales, son los funcionarios de estos recintos los que han tenido que aprender nuevos procedimientos de control, tales como la toma de temperatura y la dispersión de alcohol en las manos de los clientes que llegan.
En opinión de Eduardo Olmedo, esto no ha sido implementado de forma correcta. “Aquí hace falta una mejor capacitación de los funcionarios de los malls. He visto en varias ocasiones como miden la temperatura con pistolas de forma errada, poniéndolas en manos o en el cuello. La forma correcta es dirigiéndola a la frente”, explica Olmedo.
