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Una gran fiesta se vivió en Los Andes durante el último fin de semana, luego del paso por la ciudad del Primer Carnaval Cultural de Batucadas “Antü Yampai” (Sol Resplandeciente), iniciativa organizada por la Escuela de Carnavales “Deserteirus” que agrupó a más de 30 delegaciones provenientes de Copiapó, La Serena, La Calera, Coquimbo, Santiago, Pomaire, San Felipe, Curicó, Concepción, Temuco, Osorno, Puerto Varas y Puerto Montt.
El viernes los transeúntes disfrutaron de un pasacalle nocturno que se hizo notar con el ritmo de la batucada, estilo de percusión brasileña con influencias africanas. Los malabaristas, la danza afro y los zanquistas también llamaron la atención del público que dio la bienvenida a las distintas demostraciones culturales.
Otro pasacalle se realizó a eso del mediodía del sábado por las calles céntricas de la ciudad, luego los mismos miembros de las distintas escuelas realizaron talleres gratuitos de malabarismo y batucada en la Plaza de Armas, actividad que encantó sobre todo a los más pequeños, curiosos de aprender sobre ritmo y movimientos de equilibrio con diversas partes del cuerpo.
El gran show central se llevó a cabo cerca de las 18:30 horas en el Parque Ambrosio O’Higgins, donde los más de 300 batuqueros se reunieron en una gran fiesta en el anfiteatro. El frío no fue impedimento para que los asistentes disfrutaran de la energía de la percusión. Romina Navarro, presidenta de la Agrupación Escuela de Carnavales “Deserteirus”, evaluó positivamente esta primera experiencia como dueños de casa: “En Los Andes nunca se había visto un carnaval de esta magnitud, nosotros recorremos todo Chile y Los Andes no tenía su propio carnaval. Hemos recibido muy buenas opiniones así que esperamos que esto perdure en el tiempo. Esta era la prueba y nos dimos cuenta que resultó. Las agrupaciones que asistieron ya confirmaron su presencia para el próximo año, el que se quiera sumar, bienvenido sea”.
Participando de la actividad el Alcalde Manuel Rivera acompañó a quienes lideraron esta iniciativa, agradeciendo la organización que permitió un fin de semana lleno de una variedad de demostraciones culturales: “Vibramos con los bailes y los tambores, se remecieron las calles y es lo que vivimos durante estos dos días en Los Andes. Fue bonito, sabemos que a veces complicamos el tema del tránsito, pero incluso eso los conductores lo aplaudieron porque era una congestión sana y que tenía que ver con el arte, con motivaciones que necesitan los espacios que como autoridades tenemos que darles”.
