Disconformidad y frustración son parte de las sensaciones que quedaron en la Municipalidad de Putaendo la tarde de este lunes, luego que la sesión del Servicio de Evaluación de Impacto Ambiental aprobara por unanimidad la Declaración de Impacto Ambiental del proyecto “Sondajes Mineros de Prefactibilidad Las Tejas”, de la Compañía Minera Vizcachitas Holding.
La sesión realizada vía videoconferencia tuvo la intervención del alcalde(s) Fabián Muñoz, que con argumentos técnicos y políticos, rebatió la recomendación del Servicio de Evaluación Ambiental, que llamaba a aprobar la iniciativa que pretende realizar hasta 350 sondajes durante los próximos cuatro años.
Sin embargo, las autoridades regionales hicieron caso omiso a las palabras del alcalde(s).
“Tenemos una sensación de frustración sin duda. Sentimos que no fuimos escuchados ni por el intendente, ni por los seremis. Ellos aprobaron todo sin ningún cuestionamiento. Sentíamos que los informes, como el de DGA, que claramente señala que las vertientes que se van a ocupar son parte del caudal del Río Rocín, eran un argumento serio. Además, el interesado, en este caso la minera, no tiene derechos de agua en esta cuenca. Este proyecto va a afectar nuestra calidad de vida, va a afectar nuestra fuente de agua más preciada que tiene la comuna. La municipalidad, desde el alcalde Guillermo Reyes Cortez y el Concejo Municipal, ha tenido siempre una postura clara: No a la gran minería extractiva que destruye el medio ambiente. Estamos tratando de resguardar el último bastión de Chile central que no tiene presencia de gran minería”, sostuvo Fabián Muñoz.
En la instancia también participó Patricia Fuentes, presidenta de la Agrupación Putaendo Resiste, cuyas palabras tampoco fueron tomadas en cuenta por la comisión evaluadora, generando bastante enojo en la comunidad organizada de Putaendo.
“Lo que molesta es la forma, la forma en que se monta esta reunión online, con cero empatía, no fuimos escuchados. Ni siquiera sabemos si la intervención buenísima y técnica que hizo la municipalidad fue escuchada o si fue escuchado lo mío como ciudadana que no manejo cosas técnicas, sino que me mueven la fuerza y el cariño por esta tierra, por la tierra de mis hijos. Por lo que se pudo ver, los seremis no escucharon. Si hubiera sido así, se hubieran dado cuenta de los errores que quedaron de manifiesto y que la municipalidad los colocó en su intervención como la cantidad de agua que viene en el río. Ellos (seremis) pudieron haber hecho alguna consulta, que los hubiera ayudado, para que ellos hubieran votado más en consciencia”, emplazó la dirigente.
Autoridades y comunidad organizada hicieron un llamado a izar banderas negras en todo Putaendo en señal de tristeza y molestia. Además, no descartaron realizar acciones legales en el corto plazo para detener el avance de la gran minería en territorio putaendino.