La PDI realizó variadas diligencias que incluyeron toma de declaraciones a víctima y testigos, empadronamientos, exámenes médicos y pericias a dispositivos digitales, las que permitieron establecer que el imputado sostenía una relación con la menor desde febrero del año 2019, desde que tenía 11 años, a quien conoció en circunstancias que arrendaba una habitación en el inmueble de su abuela, donde surgió un lazo de amistad con la familia que aprovechó para ganarse su confianza.
De acuerdo a antecedentes del caso, el agresor realizaba diversas solicitudes de connotación sexual a la niña, a las que accedía bajo presión y amenazándola con dejarla en caso de develar el embarazo a su núcleo familiar.
Lo anterior fue puesto en conocimiento del Ministerio Público, lo que permitió gestionar una orden de detención verbal emanada del Juzgado de Garantía de Valparaíso, siendo finalmente aprehendido en su lugar de trabajo.