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Como ya es tradicional, el Centro de Promoción de la Salud y la Cultura de Quillota, celebró un nuevo cumpleaños de los niños y niñas inscritos en la Red Municipal de Centros de Salud, que dejan de ser parte del Programa de Control del Niño Sano, al cumplir los 6 años.
Este cumpleaños masivo se realizó en dependencias del Centro Promo y contó con la presentación del payaso Sardino, quien brindó su divertido show de circo a los niños participantes y sus familias.
Como en toda celebración de este tipo, también se cantó el “Cumpleaños Feliz” y se entregaron frutas y jugos para incentivar la alimentación saludable entre los menores.
Según explicó Sandra Varas Castillo, encargada del Centro de Promoción de la Salud y la Cultura, esta actividad se realiza desde hace unos 10 años, en coordinación con los centros de salud municipales de la comuna, y busca marcar un momento especial en la vida de niños y niñas que dejan de asistir a los controles periódicos que considera este programa.
“La idea es establecer un hito cuando el niño se va del Control del Niño Sano, que no sea de una manera negativa, por el contrario, que sea de una manera positiva. Queremos establecer que celebrar un cumpleaños es algo importante para toda persona y para toda familia. Para nosotros, como organización dependiente del Departamento de Salud Municipal de Quillota, es importante celebrar cada uno de los procesos de vida de las personas y por eso que este cumpleaños es tan importante y se da el realce que debería tener cualquier celebración, cuando cumplimos un año más”, explicó Sandra Varas.
Padres contentos
Los padres que asistieron a la iniciativa valoraron el trabajo realizado por los profesionales de SaludQuillota. Carolina Tapia, mamá de Amanda, comentó que “es una súper buena iniciativa, nos encantó. Es primera vez que veníamos, no conocíamos este lugar y es súper bonito, nos encantó. Es necesario que mi hija comparta con otros niños de la misma edad de ella, así que súper. Ojalá no se perdiera esa iniciativa”.
Para Carlos González, vecino de la Población O’Higgins y papá de Maximiliano, se trató de una jornada muy positiva para su hijo. “Se entretuvo, fue una tarde agradable para él. Compartió mucho, fue feliz, comió todo lo que ofrecieron y no dejó tranquila a la señora de la fruta, pues le gusta mucho la fruta. Es una muy buena iniciativa, hay que seguir haciendo más cosas para que los niños se diviertan y este día no se les olvide”, concluyó.
